Magia de Calle II
CONTINUACIÓN DE MAGIA DE CALLE I
La última referencia bibliográfica añadida es la de las notas de conferencia de Donald B. Lehn. No son muy extensas, pero son muy completas y disfrutables. En estas notas se hace referencia a la Edad Oscura y como en una época en la que no había espacios para que los artistas pudieran mostrarse, la calle fue la solución y la mejor salida. No tengo ni idea de historia y desconozco si esto fue así, pero lo cierto es que acabamos de vivir una pandemia y que no han sido pocos los artistas que ante los cierres de teatros y salas, han vuelto a compartir y mostrar su arte en las calles (como fue mi caso). Por eso creo que es muy posible que la magia de calle o los espectáculos de calle en general hayan salvado y preservado el arte durante periodos difíciles a lo largo de la historia.
Poder actuar en la calle es como un súper poder. Te hace totalmente independiente, no estas obligado a rendir cuentas en redes sociales o a un jefe… eres libre, porque puedes hacer lo que te gusta siempre que quieras, puedes trabajar lo que quieras, ganar lo que quieras, vivir dónde quieras… tiene muchísimas ventajas.
Claro, todo esto está muy bien. Pero… qué es lo que nos frena a la hora de actuar en la calle. Tal vez esa asociación con la mendicidad… tal vez pensar que estamos regalando nuestro arte… tal vez el miedo a que no nos paguen o a que no nos miren, o a sentir que lo que hacemos no tiene valor… o a que venga un policía nos multe y nos quite el material… o a que nos roben mientras estamos actuando… Está claro que hay muchos miedos a vencer para conseguir sentirnos cómodos y dignos en un medio aparentemente tan hostil.
Para intentar resolver todo esto, hoy voy a entrevistar a dos artistas de calle. Estos tienen maneras de hacer radicalmente distintas pero convergen en lo importante y es gracias a eso que no tienen ni pueden tener, ninguno de los miedos anteriormente mencionados.
Tyler Haze
Tyler Haze es una persona cuanto menos diferente. De hecho no es una persona, es un personaje. De la persona que hay detrás no puedo hablar ya que esta es secreta y no la muestra. El personaje Tyler Haze es el que hace la compra, el que tiene amigos, el que actúa. Es muy alto y tiene una mirada que puede acercarse sutilmente a lo diabólico. En definitiva es un personaje mágico con facilidad para crear una atmósfera mágica sólo con estar.
Hecha la presentación, vamos a ver lo que nos cuenta. (transcribo la conversación entre Kike Aguilera, Tyler y un servidor para las clases de la ACAI)
¿Para qué hacer magia de calle?
La magia de calle es un mercado abierto. Si quieres que te contraten para un evento, tienes que llegar a tu posible cliente y cerrar un contrato. Y cuándo nadie te conoce y además necesitas práctica, la calle te da una solución para todo, dónde el único límite lo pones tú.
La magia de calle permite muchos formatos, el clásico es el del mago de escena o salón. Creo que tu te has centrado en otra modalidad. Cuéntanos.
He intentado realizar magia de calle de escena como dices, pero no me gusta la sensación de tener que llevar una maleta o un altavoz… no me gusta ir cargado y es algo que priorizo. Cuando hago el Walk around (magia de cerca) lo llevo todo en los bolsillos. Cómo mucho una pequeña bolsita dónde me cabe todo el material para poder tener libertad de movimiento. Me gusta por ejemplo, aquí en Barcelona, ir a Plaza Real, ir a una terraza y de las 10 mesas que hay elegir sólo dos en las que yo crea que la cosa va a funcionar y despúes caminar a otra plaza para ir seleccionando a los espectadores ideales y de esa forma no desgatarme con malas experiencias. Si voy cargado me resultaría muy costoso. Por otro lado me siento muy cómodo en el formato de magia de cerca, ya que no tengo que atraer un corro de gente, sino que es sólo entablar una pequeña conversación de tú a tú desde mi personaje.
¿Qué es exactamente lo que haces por las terrazas?
Casi lo mismo que cuando te contratan para hacer magia de mesa en mesa. Pero en vez de ir a un restaurante, voy a 10 restaurantes y trabajo de mesa en mesa. Se puede hacer en terrazas o según la época del año directamente por la calle. Ves un grupo grande de gente, unas 6 personas, ves que el grupo se está divirtiendo y que les puede encajar algo de magia y voy y le hago magia, sin terrazas, sólo parándolos en mitad de la calle.
¿Cómo sabes a quién parar?
Eso es algo que vas aprendiendo con el tiempo. Sobre todo los primeros meses hay una vergüenza que no te deja tratar con la gente. Y aveces descartamos grupos enteros por miedo. Cuando te quitas la vergüenza ves que no hay límites, que todo estaba en tu cabeza. Por otro lado no sabría definir que es lo que me guía a acercarme a unos grupos y a otros no… es como que algo me resuena en la cabeza y me dice, ve allí… y aveces acierto y otras no. También creo que influye mucho el como te sientas tu con ellos. El gustar o no depende más de ti que de los demás. Después hay que intentar leer lo que les va a gustar. Si consigues que haya confianza todo irá bien.
¿Te da miedo que te rechacen o te digan que molestas?
En primer lugar, antes de acercarme, intento saber si les voy a molestar. Sí es una pareja que está en plan íntimo no voy a molestarles. Sigo muchos criterios como estos y si en alguna ocasión fallo, soy consciente de que he podido ser yo el que se ha equivocado, pero también que pueden ser ellos los que igual tienen que relajarse un poco.
¿Cuál es el procedimiento que sigues al acercarte a una mesa?
Lo primero saludar y entrar en el estado energético en el que están ellos. Y después ya me centro en la magia.
¿Y intentas que te vean llegar de lejos, te muestras antes de acercarte?
Sí, yo juego mucho el personaje. Soy muy alto por genética y eso le va muy bien a lo que quiero transmitir, por otro lado voy con traje o chaleco, con porte elegante, mis amuletos y con sombrero de copa. De esta manera al llegar a la mesa ellos ya saben que eres mago. Es importante dejarse ver.
¿Qué tipo de repertorio tienes para magia de calle?
Para ejemplificarlo bien voy a basarme en una rutina que hacía en 2015/2016 en Amsterdam. Eran tres rutinas: Bolas de esponja, cartas y anillo y cordón. Rutinas de 3 minutos, en total nunca más de 10 minutos. Como vez todo esto me cabe en el chaleco que llevo ahora mismo.
¿Notas diferencia en hacer magia por Europa a hacer magia en España?
Aquí está más desprestigiado y allí parece que lo valoran más o al menos muestran mas respeto. Personas maleducadas y personas que te tratan bien hay en todas partes. En base a mi experiencia puedo decir que allí me he sentido más acogido. Creo que se debe a que tienen más cultura de calle y a que así como aquí está prohibido, allí se hace más la vista gorda. En el caso de Amsterdam en particular era más fácil también porque está condensado y se puede recorrer todos sus focos turísticos 5 veces en 4 horas. En Barcelona los desplazamientos son muy largos y eso es tiempo que no estás trabajando.
¿Crees que no hablar inglés es una barrera para este formato de magia de carca?
Sí, es un gran impedimento. Si quieres estar cerca y hablar con la gente es muy necesario ya que soluciona muchas cosas.
¿Cuéntame como te lo montas para pasar la gorra?
Es muy bueno tener una frase final para remarcar que esto lo haces por dinero. Viajando era fácil porque les podía hablar de mi proyecto de recorrer el mundo con la magia. Aquí en Barcelona suelo explicar que me gano la vida con esto. Pero lo cierto es que muchas veces te dan dinero espontáneamente sin ni siquiera haber terminada el show. Al principio lo rechazaba e indicaba qué mejor cuando terminase, creo que es un error, mejor recoger el billete y seguir. También suelo proponerles un reto, en mi caso lo hago para que me sigan en instagram pero hay magos que lo hacen para conseguir dinero. Les dices, si consigo que la carta que estás pensando esté marcada en esta baraja me merezco una propina verdad… o me seguiréis en instagram… siempre hay métodos. Cualquier cosa que se te ocurra, por disparada que sea, la puedes probar. Esa es la magia de la calle. Y es importante probar las ideas al menos 6 veces ya que las primeras veces no las harás con toda la seguridad que la idea merece.
¿Hay algún horario mejor que otro?
Depende a quién quieras dirigirte. Para familias mejor medio día, pero para mí, que me enfoco mas a un público adulto en modo fiesta, prefiero a partir de las 19:00 hasta las 11:00 o 12:00 de la noche. Suelo estar entre 3 y 5 horas. No suelo forzarme mucho para no desgastarme, cuando estoy algo cansado me voy.
¿Cómo gestionas la expectativa del dinero?
Si vas a salir a hacer magia a la calle, sal a divertirte. No pienses en que vas a ganar dinero. Yo he sifrido mucho por salir con la mentalidad equivocada. Te quemas por perseguir el dinero, si sales para divertir y lo disfrutas, el dinero irá llegando. Primero hay que planteárselo como un reto para perder la vergüenza, para encontrar la forma en la que vas a interaccionar y una vez tienes confianza descubres lo que ellos sienten que les estás aportando y hay es cuando te vas a sentir bien a la hora de pedir el dinero. Si te centras en que el dinero no es lo importe no te sentirás mal ni porque te den mucho ni porque te den poco y tu juegas a hacer magia en la calle y ya está.
¿Qué te ha aportado la magia de calle?
Para mí la calle me ha servido para coger confianza en mi magia, en definir mi personaje, a descubrir lo que soy y a poder llevarlo a otros sitios. Es cierto que podría haber llegado a lo mismo por otras vías… pero sería un Tyler diferente sin este background. La calle y la confianza van de la mano. Si haces calle coges muchísima confianza. Y la confianza es lo que te hace ser diferente y hace que el público te vea tal y como eres.
Daniel Guantes
Antes de comenzar al transcribir la entrevista os cuento un poco sobre Daniel Guantes. Es una persona especial y lo sabe quien lo ha conocido alguna vez. Se caracteriza por su apertura al aprendizaje y las experiencias. Siempre enfrentando sus miedos. Comenzó haciendo magia y música (en mi grupo de amigos desde pequeños todos teníamos alguna relación con el arte y Dani era uno más). Finalmente se quedó sólo con la música. A día de hoy vive de la música, de conciertos, espectáculos y complementa su día a día, sus viajes y aventuras con la música de calle desde hace unos cuantos años. Esto es sólo la punta del iceberg y lo veo suficiente por hoy. Vamos con la entrevista. Por cierto la letra en cursiva es Kike o yo indistintamente.
¿Cuéntanos un poco, qué es lo que haces en la calle?
En la calle hago música en solitario. Con Miguel he hecho magia y música en directo, con lo que sabemos lo que es la combinación, cómo funciona en conjunto y de manera separada y los niveles de atención que requiere cada situación.
Me gusta la calle porque me da mucha libertad, está dirigida para la gente que quiere realmente escucharte. También pongo un cartelito con mi nombre y redes sociales y al final esto me da una difusión muy libre y muy transparente. Me agrada que quien me ve en la calle y le gusta, luego cuando me busque en internet va encontrar cosas mucho mejores de mi trabajo artístico. Por eso creo que es una buena puerta de entrada, porque si ya te ha gustado lo que hago en la calle que dentro de lo que puedo hacer es un 6, luego cuando veas el 10 de lo que hago dentro de mis posibilidades seguro que te genero una buena impresión y es público seguro que se va a quedar conmigo. Entonces hay gente que le dedica tiempo a las redes sociales para convencer a la gente que ya les sigue de que vayan a verle y yo utilizo la calle para no dando un 100% conseguir que gente que no me sigue empiece a seguirme. Sin contar el viajar y todo lo bonito que acompaña a este tipo de experiencias.
Entonces, el enfoque que le das a la calle… ¿ es para sacar dinero o es para darte a conocer?
Lo que he comentado hasta ahora es lo que me mueve, es el lado más disfrutón. La calle descubres cosas muy buenas. Por ejemplo, ahora llevo una semana de viaje y el pasado miércoles en León estuve tocando en la calle con un amigo que improvisa. Ese día la policía nos echó y nos tomó los datos con un papelito. Hubo gente que pensó qué nos habían multado y al día siguiente vi que muchas personas que habían estado allí me habían escrito a Instagram ofreciéndose a pagar la multa. Sólo ver que hay gente mostrándome ese apoyo… que me dices, mira, me avergüenzo de mi cuidad, creo que lo que estabais haciendo era muy bonito y me ofrezco a pagar la multa. Me llegaron varios mensajes de ese estilo y a mí eso me sobrecogió. Ver que había personas tan a gusto capaces de contribuir en caso de multa. Luego una chica que me vio me invitó a una jam que había al día siguiente en un Bar. Así que cambié mis planes y me quedé, conocí más músicos y hoy tras una semana vuelvo a León a cenar con ellos. Y es otra red de contactos que se ha creado. Para mí son experiencias muy equilibradas con muy buenos resultados. Os cuento otra anécdota del Viernes. Paré en Ponferrada, me puse a tocar y un músico que me vio, un saxofonista se puso a tocar conmigo. Ya una experiencia genial el poder crear juntos. El caso es que al poco se paró un violinista que también se unió. Y después llegó una chica que tocaba la flauta travesera y se unió a los tres. Estuvimos tocando los cuatro juntos sin conocernos de nada, pero ellos eran unos musicazos y se entendían de maravilla. Hicimos una versión de una canción de Kase.O y el público que estaba allí lo grabó, lo subió a redes sociales y Kase.O lo compartió. Y para mí él es un ídolo. El caso es que empezó la tarde en un a ver qué pasa y terminé la noche feliz, sabiendo que Kase.O había visto un trocito de lo que yo hacía.
Coincide con lo del entrevistado anterior, que ahora que tenemos las redes sociales se valora mucho más la divulgación, el dar a conocer tu trabajo por encima del dinero. Parece que ahora se le da más valor a eso que a la economía.
Claro, es que una cosa responde a una misión de largo recorrido y el dinero a una necesidad de muy corto plazo. El dinero para mí es lo último. Mentiría si dijera que no me satisface cubrir los gastos y sentirme independiente. Para mi es un valor fundamental en mi vida tener la sensación de poder viajar, comer fuera y poder cubrir todos los gastos con lo de la calle. O por ejemplo el día que estuve con los músicos poder darles el dinero o ir a cenar todos juntos gratis, para mí ese tipo de cosas valen más. Otro ejemplo, el chico del saxo me dijo que estaba montando un festival en el Congo y que si salía adelante que fuese. Para mi esas cosas lo valen todo.
Además de todo esto también me gusta el no tener que poner en redes que salgo a tocar, es decir, el quedarme cosas para mí. La sensación de estar tocando en una cuidad, no difundirlo y que nadie lo sepa también me encanta. Es como un súper poder, el poder tocar y poder crear momentos especiales con la gente sin tener un bolo cerrado. Voy a contar una anécdota de estas navidades con Miguel. Estábamos tocando y haciendo magia en Palencia y pasó una señora que llevaba a su marido en una silla de ruedas. Su marido llevaba como una bolsita de oxigeno. Su mujer le quitó la mascarilla con mucha ternura y se quedó viéndonos sonriendo y acariciándole en pelo a su marido durante cinco minutos. Si esos cinco minutos han servido para que ese día haya sido un poco mejor en la vida de esas dos personas y me voy a dormir mucho más feliz. Y no necesito ponerlo en redes sociales ni necesito nada más. Es un privilegio poder alegrar a alguien y hacerlo acompañado del arte de Miguel en este caso.
Creo que esta es una de las claves para quién le de miedo actuar en la calle o le tenga miedo al fracaso. Entender que si el fin es bueno por naturaleza y muy puro, por hacer feliz a quien te ve, el fracaso es menos fracaso, incluso no puede existir. Además que lo que haces no es algo superficial, sino algo maravilloso.
Otra cosa que me gustaría añadir sobre tocar en la calle es que siempre es una referencia a tierra. Que seas capaz de ser feliz y disfrutar de tu arte en cualquier tipo de escenario. Hace poco fui telonero de un cantante super famoso con muchísimo público y un equipo increíble y al día siguiente estaba tocando en las piscinas del un pueblo, al día siguiente en una boda y al día siguiente en la calle. Y yo lo que quiero es ser igual de feliz los cuatro días y no necesitar un escenario grande para ver el poder que tiene el arte.
De las primeras veces que toqué en la calle fue en el interrail, allí coincidí una semana con Miguel, y hay una anécdota que cuento en los conciertos que es que yo estaba tocando y vino un vagabundo con sus dos perros. Yo me sentí incómodo y el colocó a los perros alrededor mío. Yo acepté la situación y el me puso unos pañuelos en la funda de la guitarra para venderlos. Yo pensé… este va a ser el peor escenario en el que toque y de aquí para arriba. El caso es que la gente dejó de acercarse, dejaron de echar pasta y se fueron todos. Y cuando me retiré el vagabundo me intentó dar dinero y una Cocacola. Estuvimos hablando y se me fueron un montón de prejuicios. Ví que la gente era buena por defecto y desde entonces esa es mi directriz para pensar, el confiar en la gente siempre.
En este punto de la entrevista Dani nos enseña su furgoneta con la que va haciendo viajes, conociendo ciudades y dándose a conocer. También nos enseña sus equipos de sonido y su manera de moverse en patinete por la cuidad y poder llevar todo a la espalda. También quiero señalar (ahora soy Miguel), que Dani es confiado con la gente y que puede tocar con el patinete o la bici detrás suyo y sin candar a ningún lado con tensión cero por si se lo roban. Y es que para él algo así no es de esperar y si ocurre (cómo alguna vez a ocurrido) se recuerda que por una persona que robe no le merece la pena vivir preocupado o no confiar en los demás.
La entrevista sigue con algunas divagaciones en las que cuenta nuestros comienzos en la magia en la música. Recuerda cómo me engañó haciéndome un juego de unas jotas atrapadas de Ascanio (con 15 años), habla sobre el espectáculo que tenemos en común Música Mágica y sobre el ritual de las botellas que hacemos antes de empezar. De ahí volvemos al tema que nos ocupa de magia o espectáculos de calle y Dani se encamina a contar dos anécdotas más.
Voy a contar dos anécdotas más con Miguel en el Interrail. Una vez Miguel comento: Yo creo que la gente echa dinero en la calle por cualquier cosa. Así que se puso ha hacer un baile con dos cáscaras de plátanos y le echaron dinero. Le hice una foto y se le vé súper orgulloso. Y otra anécdota de Miguel en Bruselas, se puso a improvisar canciones insultando a la gente que pasaba por la calle, pensando que como nadie le iba a entender… qué más da lo que cantara. Y la gente también le echaba dinero.
Todo es parte de perderle el miedo a la calle y disfrutar lo que haces más allá de los resultados.
Sí. La semana pasada gracias al tema este de la furgo me salió un concierto cerrado en León y ahora me gustaría plantearme ir cada semana a una cuidad y hacer un mínimo de vida en cada lugar para tener más gente conocida en cada sitio al que vaya, ampliar mi red de contactos y enriquecerme de ese modo.
En generelar no lo grabo. Pero si que me gustaría para poderlo compartir ya que hay un poco de oscurantismo entorno a este mundo del arte de calle. Estoy desarrollando un proyecto que se llama la Calle Sonante, para que sirva de plataforma para poder registrar dónde hace calle cada uno y que tal ha sido la experiencia. Si aquí bien, o aquí me han echado, o aquí hace falta un permiso 15 días antes y se pide en esta web o en este sitio… o se puede pero sin altavoz o no están permitidos malabares con fuego… En definitiva un punto donde se condense la información que igual también puedo acompañar de un mini blog.
Fantástico Dani, gracias por tu tiempo y nos vemos pronto.
Gracias a vosotros y a comprar Morcillas Secret. Un beso guapos.
Bibliografía para seguir investigando
Street Magic de Edward Claflin, 1978
Street Magic de Steve Beam, 1987
Memoirs of a True Street Performer de Carl «Polaris» Melish, 1989
Straßenzauberkunst – Eine kleine Abhandlung (Magia callejera – Un pequeño tratado) de Alexander de Cova, 1998
Be A Street Magician! (A How-To Guide) de David Groves, 1999
Classic Indian Street Magic; de Martin Breese
Street Magic Secrets 1 & 2, de David Penn
Magia de Calle de Adrián Conde (Notas de Conferencia)
Web de Adrián Conde: http://www.espectaculosmagia.es/category/consejos-para-hacer-magia-de-calle/
Magia de Calle Raúl Camagüey
Mírame, D. B. Lehn en MME (Mírame no es el nombre exacto del artículo, está en la circular del 75 a 90… hay que buscarlo, pero realmente merece la pena, te encantará.)
La Magia en la Calle (Conferencia de Donald B. Lehn ofrecida en Vitoria en Septiembre de 1999)